Las generaciones de hoy en día necesitan mejores conocimientos financieros, en la escuela nos enseñan poco sobre educación financiera y eso hace que, a lo largo de nuestra vida, no planifiquemos bien nuestros objetivos y/o metas y acabemos pagando más por comisiones o perdiendo dinero con productos financieros que realmente no necesitamos.
La mayor parte de la gente sabemos y estudiamos con precisión cuales son las ofertas y comparaciones de productos de telefonía a la hora de comprar un teléfono o cambiar de compañía, sabemos y estudiamos con precisión qué prestaciones y gama de precios tiene el coche que deseamos comprarnos (incluso a veces mejor que el vendedor).
Sucede lo mismo con ofertas de vuelo y hoteles a la hora de planificar algún viaje de vacaciones, cuando salimos a comer fuera, de compras, etc.
Pero a la hora de comprar todos esos productos estrictamente estudiados y planificados, la mayor parte de las veces acabamos pidiendo un préstamo (incluiremos el término “tarjeta de crédito” para ello también) y fiándonos de las condiciones que nos imponen la mayoría de los bancos para hacer frente a esos gastos.
Nos centramos en el “vehículo” y no lo preparamos estudiando el “camino”.
Si nos anticipamos un poco y planificamos cual va a ser nuestro objetivo, en lugar de pagarle comisiones al banco, podemos hacer que sea el banco el que nos paga a nosotros por “prestarle” nuestro dinero.
Alexandre virgili
Consultor financiero experto en:
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Además tengo amplia experiencia en el mercado Forex
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